La noche del 3 de junio de 2025, una explosión en el sector de la Bahía, en las calles Eloy Alfaro y Ayacucho de Guayaquil, causó conmoción y daños materiales en al menos seis locales comerciales. Iván Michael B. C., presunto responsable del atentado con un artefacto explosivo, fue detenido tras investigaciones policiales. La Fiscalía lo procesa por terrorismo, y un juez dictó prisión preventiva mientras avanza la investigación. Comerciantes reportan que el ataque estaría ligado a extorsiones, con demandas de pagos para evitar este tipo de agresiones.
La Policía presume que el explosivo fue artesanal o dinamita, aunque no se encontraron vestigios claros en la escena. Los comerciantes denuncian un patrón de amenazas, con panfletos exigiendo pagos semanales de hasta $300 o entradas de $3.000, atribuidos a grupos como Los Lobos, Latin King o Los Tiguerones, aunque las autoridades dudan de su autenticidad. La zona, una de las más concurridas del comercio informal, vive bajo temor, y los comerciantes piden mayor presencia policial, como una Unidad de Policía Comunitaria.
El Municipio de Guayaquil, liderado por el alcalde Aquiles Álvarez, asumirá la reparación de los módulos afectados, mientras que la gobernadora del Guayas, Zaida Rovira, señaló que la seguridad en la Bahía es responsabilidad municipal. La Policía ha reforzado la vigilancia con 60 efectivos en el distrito 9 de Octubre y la Zona 8, pero los comerciantes insisten en la necesidad de denuncias ciudadanas para actuar con eficacia. Este atentado refleja el creciente clima de inseguridad en el sector comercial.
