Allison Mack, conocida por su papel de Chloe Sullivan en la popular serie Smallville, está intentando trazar un nuevo rumbo en su vida tras haber cumplido su condena por su implicación en la infame secta sexual NXIVM. La actriz, que fue sentenciada por cargos de conspiración para cometer extorsión y crimen organizado, ha desaparecido casi por completo del escrutinio público, buscando una existencia lejos de los reflectores que alguna vez la iluminaron. Acaba de dar un nuevo paso en su vida: contrajo matrimonio con su pareja, Frank en una ceremonia discreta.
Tras su liberación, la vida de Mack se ha convertido en un enigma para muchos. Se sabe que ha intentado reconstruir su vida en un entorno de privacidad extrema, alejada de la industria del entretenimiento que la vio crecer. Su caso, que conmocionó a Hollywood y al mundo entero por la naturaleza de los crímenes de NXIVM y la manipulación a la que fueron sometidas varias mujeres, sigue siendo un recordatorio sombrío de los peligros de las sectas.
Aunque los detalles de su actual día a día son escasos, la historia de Allison Mack resalta las complejidades de la rehabilitación y el perdón social después de un escándalo de tal magnitud. Su intento por forjar una “nueva vida” plantea interrogantes sobre las segundas oportunidades y el camino hacia la redención para aquellos que, alguna vez, estuvieron en el centro de un oscuro capítulo de la justicia y la cultura pop.
¿Por qué Allison Mack estuvo en prisión?
El presente esperanzador de Allison Mack contrasta profundamente con los titulares que protagonizó algunos años atrás.
En abril de 2018, la actriz fue arrestada y posteriormente condenada por su papel como reclutadora dentro de la organización NXIVM, dirigida por Keith Raniere. Aunque NXIVM se presentaba como una empresa de desarrollo personal, las investigaciones judiciales revelaron una red coercitiva que explotaba sexualmente a mujeres, bajo un subgrupo secreto conocido como DOS.
Según documentos judiciales citados por la prensa, Mack “reclutó mujeres para lo que se suponía era un grupo de mentoría femenina, que en realidad fue creado y dirigido por Keith Raniere”.
Dentro de este grupo, las víctimas eran obligadas a entregar “fotografías desnudas, activos financieros y confesiones comprometedoras” que servían como garantía para forzarlas a obedecer.
En el juicio contra Raniere —que culminó con una sentencia de 120 años de prisión en octubre de 2020— se revelaron múltiples casos de abuso psicológico, físico y sexual.
Una de las víctimas, identificada como Nicole, declaró ante el tribunal: “Nunca acepté renunciar al derecho sobre mi cuerpo”. Otra sobreviviente, India Oxenberg, relató que Raniere la manipulaba para que esperara desnuda, y afirmó: “Usted es un depredador sexual y me violó”.
Keith Raniere fue declarado culpable en 2019 por tráfico sexual, posesión de pornografía infantil, extorsión, trabajo forzado y crimen organizado. La fiscalía documentó que dirigía un sistema piramidal de abuso en el que las mujeres eran marcadas con sus iniciales mediante cauterización sin anestesia.

Allison Mack, por su parte, se declaró culpable de asociación delictiva y crimen organizado en abril de 2019. En junio de 2021, fue sentenciada a tres años de prisión, aunque fue liberada en 2023 tras cumplir 21 meses gracias al First Step Act, una ley de la era Trump que permite reducción de condena por buena conducta.
Previo a su sentencia, Mack ofreció una carta de disculpa a las sobrevivientes de NXIVM, publicada por Us Weekly el 21 de junio de 2021. “Es de suma importancia para mí decir, desde el fondo de mi corazón: lo siento mucho”, escribió la actriz.
“Me entregué a las enseñanzas de Keith Raniere con todo lo que tenía. Creí, con todo mi corazón, que su mentoría me estaba llevando a una mejor y más iluminada versión de mí misma. Le entregué mi lealtad, mis recursos y, en última instancia, mi vida. Fue el mayor error y el mayor arrepentimiento de mi vida”, expresó Mack.
“Lo siento por aquellas a quienes introduje en NXIVM. Lo siento por haberlas expuesto a los esquemas nefastos y emocionalmente abusivos de un hombre retorcido. No tomo a la ligera la responsabilidad que tengo en la vida de quienes amo, y siento un gran peso de culpa por haber abusado de su confianza y haberlas llevado por un camino negativo”, concluyó.